jueves, 22 de septiembre de 2011

El alto costo de la vida y sus consecuencias en Panamá

Como recordarán fue en la casa de una embajada extranjera donde se pacto la famosa alianza, sumado a ello, la búsqueda de otra alternativa electoral, luego de los dos periodos vividos con los partidos arnulfistas y PRD, los cuales no llenaban las expectativas del electorado dio el resultado por todos conocidos.

            En LaPrensa había escrito un artículo sobre las elecciones, antes de que llegaran al poder político en nuestro país los actuales personeros del CD, quienes parecen estar desarrollando una agenda política que inclinaría el desarrollo de la democracia en Panamá hacia una corriente política que había estado alejada del poder político desde los tiempos de los militares.

            El pacto fue arreglado según los intereses que cada uno tenía. Lograr que se bajara un candidato, con mucho carisma hasta ese momento, fue una jugada extraordinaria e importante. Pero esto hay que analizarlo más profundamente, ya que la llegada de los actuales personeros no fue casual. Para los Estados Unidos, la presencia de un gobierno PRD nuevamente en el área, considerada por ellos de vital importancia, no era potable, dada la corriente pro-izquierdistas que en varios países sudamericanos han llegado a tomarse el poder político.

            Un sector poderoso de derecha dentro del engranaje político norteamericano, aupó este matrimonio. Hay que recordar también que cuando ganó el presidente actual, expresó su interés de fortalecer gobiernos de derecha, en la región, liderizado por el gobierno panameño.

            Es entonces que mediante la alianza entre el Panameñista, Molirenas y Unión Patriótica, se logra alcanzar los objetivos de darle presencia a un partido político de centro derecha, quienes han estado disfrazando sus intenciones con medidas de corte populista. Es la retoma del poder por los sectores poderosamente económicos que habían estado alejados del mismo y que al retomarlo parecen estar dispuestos a no soltarlo, y con intenciones no muy santas, pues parecen abanicar intenciones revanchistas y vengativas.

El crecimiento vs pobreza en Panamá

            Con mucho entusiasmo se habla del crecimiento que experimenta Panamá en materia económica, un 9 por ciento y más en los últimos años, al extremo que los personeros y empresarios se sonríen de lado a lado mientras, aparece un rosado muy tenue en sus obesos pómulos, ya que éste incremento se refleja grandemente en las entradas que sus empresas están experimentando.

            Pero qué pasa con el común del panameño, con el trabajador de estas empresas. Yo no comprendo nada de economía pero al igual que todos los que consumismo diariamente los productos que se venden en nuestro país, es preocupante. Veamos: el café aumentó de 15 centavos en paquetito a 35 centavos (+100%), los plátanos de dos a 25 centavos, ahora cada uno vale o 20 centavos si son pequeños, o 35 centavos si son grandes, cada uno (+100%). Las mazorcas, a dos por 25 centavos, hoy están a 40 centavos (60%). Los huevos, de 10 centavos hoy se cotizan a 15 centavos (50%), las verduras, para la sopa están por las nubes, hasta el ñame más malo está carísimo.

            El papel higiénico, la pasta de diente, el jabón de baño, el pan, por ejemplo, la flauta del chino, estaba a 35, si comprabas tres, era B/.1.05 hoy pesado suele estar, estos tres, en B/1.40, ni hablar del pan de molde, la leche, de B/.0.75 centavos, pasó a un B/.1, ºº (35% +), entre otros alimentos y productos de uso diario que han subido sus precios. Y aquí estamos hablando de aumento de precios, no de mejoramiento de la calidad de los productos, muchos de los cuales no pueden competir  con los extranjeros. Aumentos que promedian un 35 a 60 por ciento, y siguen las alzas.

            Se dice que los panameños no encuentran trabajo porque no están preparados para el mercado que exige los actuales empresarios, y por ello hay que estarse capacitando constantemente, y las culpas se las echan también a la educación. Y por ello pagan salarios muy por debajo del costo real que tiene el diario vivir, en Panamá. Realmente, desde hace varias décadas no hay un aumento considerable de salario acorde al costo de la vida, en todos los renglones de las profesiones. Así educadores, médicos, profesionales de la construcción, entre otros, ven mermados sus entradas, cada día con el alza de los productos que consumen, sumándole a ello, el gasto de luz, agua, pago del servicio de la recolección de la basura, casa,  diversión, (cuando se puede), etc.

            De darse un aumento general de salario, aducen los empresarios que esto afectará el crecimiento, y harán que muchas empresas piensen en despedir personal, o se muden de Panamá o no vengan, excusas que ya llevan varios lustro de estarlas abanicando. Los empresarios siguen produciendo con maquinarias y modelos desfasados, atrasados y viviendo de las bondades de las subvenciones. La calidad del producto no varía, estamos pagando más por el mismo, sin hacerle mayor cambio.

            Y ni hablar de las importaciones, donde el intermediario se está quedando con el botín, pues a la vez que arruina a nuestros productores, también se llenan de riquezas al ofrecer productos, que consigue a precios bajos en el exterior, mucha veces libres de aranceles, y los venden a precios exorbitantes en los distintos mercados del país.

            Entonces, el salario de los panameños está siendo asaltado no solo por estos empresarios que aumenta sus productos cada vez que así lo requieren, sin que haya nadie que se los impida, gracias a la política de la libre oferta y demanda, sino también por los jerarcas del estado, que no escatiman esfuerzos para aumentar los impuestos y crear otros en el momento que mejor les parezca. El famoso crecimiento solo le está llegando a un sector muy minoritario de la población, el resto, ve mermada su entradas y empobreciéndose cada día más.

Una juventud que pide se le atienda




            Jóvenes en Tunez, Egipto, Gran Bretaña, entre otros sitios, se han revelado y han comenzado a manifestar sus inconformidades, muchas de estas acciones se han convertido en revueltas, cuyos dirigentes y gobiernos jamás pensaron que esto podría suceder. Se han tumbado gobiernos y sistemas de varias décadas de estar imperando. Es la tecnología de las redes sociales puesta a prueba, en donde con un pequeño twit puedes congregar a personas y protestar ante las injusticias.

            Son ciudadanos cansados de que no se les escuche, que no se atiendan sus problemas, por ejemplo, el caso de los jóvenes en Inglaterra, por ejemplo, sin mayor dirección, casi voltean a ese país, mientras los dirigentes, aún sin ver el asunto, decían que eran “jóvenes si causa”, nada más alejado de la realidad. Recuerden los famosos años del movimiento paz y amor, de los hippies, cuya verdadera razón y motivos, fueron vilmente ocultados y acallados.

            Hoy los jóvenes marginados que no encuentran motivación ni espacio en una sociedad que le ha dado la espalda, están exigiendo se les oigan y atiendan sus necesidades, y qué decir de las revueltas de los estudiantes en Chile, protestando por el alto costo de la educación.

            Hay una población ávida de respuestas, que está cansada de que solo un sector sean los que se beneficien de las bonanzas económicas, son movimiento espontáneos, como los que tumbaron gobiernos, caso de Grecia o en otros lugares.

            Panamá también está haciendo su caldo de cultivo. Una juventud que no ve salida a la situación, que no está preparada para afrontar las exigencias del mercado laboral, un caldero en ebullición a punto de estallar. Ahí están las estadísticas de la cantidad de jóvenes que son reclutados por las pandillas.

La Seguridad, un problema preocupante


            Por otro lado, la seguridad cada vez es más preocupante. Ya ni a la tienda se puede ir en horas nocturnas. Las calles son tomadas por los delincuentes en horas de la noche, en casi todos los barrios del país. Es cierto que se han incautado toneladas de drogas en nuestras costas, y territorio, pero también no es menos cierto, que por las calles se pasean impunemente sicarios que a diario logran sus insanos propósitos, van en carros, armados hasta los dientes, en grupos y no son detectados por los organismos de seguridad, solo después de cometer sus delitos.

            Me inquieta el gasto que estamos haciendo en materia de compra de implementos de guerra, adecuando cuarteles en ambas costas y en nuestras fronteras, para qué son. Dicen que para combatir el narcotráfico, la delincuencia organizada, las pandillas tumbadoras de drogas, el lavado de dinero. Pero, la realidad es que la delincuencia sigue fortaleciéndose, obligándonos a convivir en medio del terror y el miedo.

            Hace unos días, en el caso de los jóvenes chinos asesinados vilmente, y cobardemente, el jefe de la cartera indicó que éste caso era “fortuito”, un caso “aislado”. ¿Dónde viven estos personeros, en Marte? En Panamá se dan a diario casos de robo en todas partes, los buses, las calles, no hay sitio donde no encuentres un “caco” o varios de ellos, tratando de quedarse con lo poco que uno carga. Y de paso con la vida misma. Los pocos que son denunciados es apena la punta del problema. Y no digan que porque uno es un caso de secuestro y los otros son casos de drogas, es distinto. Puede ser, distinto para las estadísticas, pero en la realidad es violencia y delincuencia en todo su apogeo.

            El carácter armamentista que estamos presenciando, en donde se están invirtiendo una enorme cantidad de dinero, una de la mayores en la historia de pos invasión, es peligroso y preocupante. En muchos casos, en épocas pasadas los estamentos de seguridad han sido utilizados como policía política, en buenas cuentas para perseguir a los que discrepan de las acciones tomadas por los gobiernos. En gobiernos autocráticos o dictatoriales, esto es una de las armas utilizadas para reprimir.

            Recordemos nuevamente, el papel oscuro que llevó a cabo el DENI, o el G2 en épocas pasadas. Hoy incluso, se han atrevido mediante ley acuerpar la impunidad de las acciones que cometan sus tropas, eliminando cualquier rastro de culpa al presentarse acciones contra su excesivo uso de la fuerza, y desde ya lo estamos presenciando cuando muchos actos no aclarados de muertes se han dado amparados por esta ley, verbigracia, Changuinola o las represiones de los grupos indígenas anti minerías, o los sectores obreros, entre otros.

            Recientemente, unos jóvenes encapuchados, salieron del Instituto Nacional, con el fin de cerrar la vía adyacente al colegio, y hacer de las suyas. Al minuto llegaron los anti motines y evitaron la acción de protesta. Esa rapidez de los servicios de seguridad del país, no es comparable con las que toman para combatir la delincuencia.

            En el primero, los sistemas de vigilancia, o sea las cámaras instaladas al lado de este Instituto permitieron ver la acción, pero cuando de robos o asaltos, estas cámaras, o están apagadas o no sirven. Pregunta: ¿están vigilando los movimientos de aquellos sitios en donde pueden surgir movimientos de protestas?, caso colegios o universidades.

EL PRD tiene que hacerse un acto de contrición

            Quiero culminar con un asunto que debe ponernos a pensar, y es el estigma que el PRD debe cargar por siempre como un brazo inventado por los militares para perpetuarse en el poder. Esto es cierto. No se puede negar que el mismo fue creación de una mente que estaba visualizando el futuro que viviría nuestro país luego de la apertura democrática y de la culminación de la lucha nacionalista de la recuperación de la Zona del Canal.

            Los gobiernos del PRD luego de la invasión no han estado a la altura de ese designio, en donde el General Torrijos dejó clara instrucciones para lograr culminar la etapa descolonizadora de nuestro país, esto incluía la derrota a la incultura, la mentalidad tercer mundista, el reparto equitativo de las riquezas, al uso más colectivo posible de los beneficios del canal, ha lograr romper los márgenes de pobreza, entre otros lineamientos que harían de este país, un ejemplo.

            Al contrario, cada gobierno del PRD no ha hecho lo mandatado, se han dedicado a hacer lo que hizo que los militares irrumpiera en el acontecer nacional en 1968, combatir la corrupción, clara luegos ellos dejaron muchos ejemplos de corrupción, pero por ello se debía continuar con este esquema o debía promoverse mejoras a la situación económica y social de los panameños. Al contrario nombraron a familiares, amigos, allegados hicieron de las finanzas públicas su botín político, aumentaron salarios a queridas, propiciaron el negociado de los actos públicos hacia sectores afines económicamente, entre otros problemas mucho más acuciantes.

            Es por ello que se debe revisar el actuar de los personeros que tuvieron en sus manos la oportunidad de lograr un verdadero cambio en nuestro país, consigna que nos fue arrebatada por los actuales dirigentes del gobierno nacional. Hacerse un acto de contrición, y desechar aquellos que ven el poder como medio para lograr sus más insanas pasiones así como la fórmula para enriquecerse, estos deben ser repudiados.

            Hay que propiciar el adoctrinamiento de las generaciones que forman parte del partido, lo que es la disciplina, la verticalidad en cuanto a la fidelidad del colectivo, educarlos en el seguimiento de la línea de Omar, y no el uso del partido como catapulta para sus más insanos propósito, como lo han estado haciendo los tránsfuga del partido, que sin el menor rubor saltan del PRD para incorporarse a los que electoralmente adversaron.

            Que falta de todo, incluso de respeto a los perredista que confiaron con su voto para que ellos gozaran de una curul que los representara. La azimut nos indica que se debe fortalecer las estructuras de vida interna del partido, y no estar abanicando o aventurando alianzas que no nos benefician en nada, en estos momentos.

            La verdad, amanecerá y veremos, es necesario hacer un alto y lograr que los panameños transitemos por un verdadero camino democrático, y si ese es el estigma que debemos llevar, hagámoslos valer logrando obtener nuevamente la confianza de la población panameña de que éste es el verdadero partido que hará que las oportunidades lleguen a todos, lo contrario, es darle en bandeja de plata lo que tantas generaciones de panameños lucharon por obtener, y que hoy usufructúan muy pocas personas.