martes, 6 de junio de 2017

El “Covfefe” de Donald Trump y el medio ambiente

Hoy nos enteramos de las nuevas andadas del presidente norteamericano, pues nos ha enviado un mensaje muy claro, nada saludables para el medio ambiente y para nosotros pues tomó la decisión de retirar su país del acuerdo de París, acuerdo firmado por más de 175 naciones y que intenta mitigar los efectos de la actividad humana en la contribución del calentamiento global sobre el medio ambiente. Sus palabras frente a este acuerdo ha sido la de indicar que este solo beneficia a potencias como China e India cuando todo el mundo sabe que en materia ambiental todos estamos en peligro de perder incluido los norteamericanos.

¿Por qué Estados Unidos es el segundo país más contaminante del planeta tierra?

El primero es China. Esto es debido a que las emisiones de gases de efecto invernadero al ambiente de ambos países contribuyen grandemente a los efectos del cambio climático que estamos padeciendo los mortales. Por ello las naciones del mundo tomaron la decisión de llegar a un acuerdo de bajar el calentamiento global a un mínimo. Se calcula que si no se actúa de inmediato para el próximo siglo la temperatura alcanzará 4.5° centígrados lo que hizo necesario crear políticas encaminadas a lograr un resultado de 3.5°C, pero con el acuerdo de París se tiene contemplado bajarlo aún más, al 2.7°C.
            El cambio climático es un hecho, no hay duda sobre esto. Los científicos han logrado establecer que el mismo es debido a la actividad humana en el planeta logrando acelerar cambios que hubieran tomado muchos siglos en aparecer. Los Estados Unidos a lo largo de 160 años ha sido el mayor emisor de dióxido de carbono resultado de la quema de combustibles fósiles como el petróleo y sus derivados, de gas, y de carbón siendo considerado como el responsable del 27% de las emisiones de CO2 del mundo. Les sigue la Unión Europea entre ellos, Reino Unido, Alemania y Francia con un 25%. China está en tercer lugar (11%), aunque hoy ocupa el primer lugar. Luego aparece Rusia con (8%), Japón (4%) India (3%) y Canadá (2%), todo esto forma parte de un registro llevado a cabo durante el periodo 1850-2011 del Centro de Análisis sobre Dióxido de Carbono.
            La actividad humana emite gases como el metano producido principalmente por la extracción y procesamiento de petróleo y gas, la crianza de ganado, los cultivos de alimentos y los vertederos de basura. Los norteamericanos estuvieron entre las cinco naciones que más metano por toneladas métricas produjo en el 2012. El resultado fue así, China, 1.752. India, 636. Rusia, 545. Estados Unidos, 499. Brasil, 477. La NASA observó un “punto caliente” entre Arizona, Colorado, Nuevo México y Utah, unos 6,500 k2, solo en ese lugar se vertieron 59 millones de toneladas métricas de metano a la atmosfera por la fuga en la producción de gas natural. Otro de los argumentos de por qué debe los Estados Unidos hacer lo imposible para mitigar el calentamiento global es que tiene el mayor consumo de electricidad por persona a nivel mundial y ha estado encabezando las estadísticas desde hace 50 años junto a Canadá.
            Aunque algunos vaticinan que este abandono no significa en absoluto problemas para el mundo debido a que son las empresas las que están liderando el cambio de timón frente al uso más cónsono de productos amigables con el ambiente, incluso a lo interno de los Estados Unidos, sus efectos producirán un duro revés a estos esfuerzos empresariales. Se prevé que la decisión de Trump podría sumar 0,3°C a la temperatura media global para el año 2100. Esta medida tomada por Trump supone la creación de empleos en la industria de generación de electricidad que usa combustible fósiles, como el petróleo o el carbón. En ella participan casi 1.100.000 personas. Sin embargo, a la par han estado creciendo el uso alternativo de energías renovables gracia a la política implementada por el expresidente Obama en el quinquenio pasado como la solar cuyo ritmo de crecimiento está por el orden del 25% anual y el eólico al 32% empleando en la actualidad a casi unas 900.000 personas.
            Por lo pronto la medida ha sido criticada por los principales países del orbe, y ha tenido consecuencias en el campo de los llamados asesores del presidente pues importantes figuras han presentado sus renuncias a lo largo de esta semana, por ejemplo, Elon Musk, presidente de Tesla y SpaceX, Bob Iger, CEO de Disney, y empresas como Facebook, Ford, Apple, Microsoft han hecho circular sendos comunicados en contra de la medida tomada, incluso la petrolera Exxon. Es importante resaltar que Estados como California, Oregón, Connecticut, o ciudades como Houston, o Nueva Orleans han manifestado claramente que harán caso omiso a las intenciones del gobierno de Trump y continuarán aumentando sus objetivos de lograr la reducción de emisiones y transformación al uso de energías más limpias y amigables con el ambiente. “Fui elegido para representar a los ciudadanos de Pittsburgh, no de París… El resto del mundo aplaudió cuando firmamos el acuerdo. Se volvieron locos… por la simple razón de que ponía a nuestro país, al que tanto quiero, en desventaja… El acuerdo atenaza a Estados Unidos para obtener el aprecio de capitales y activistas que sólo buscan sacar beneficio de nuestro país…”, dijo el presidente Trump. Pero estas palabras no cayeron muy bien a las autoridades de la ciudad de Pittsburgh pues una de ellas el alcalde Bill Peduto, demócrata, aseguró que seguirá implementando el Acuerdo de París, por “nuestra gente, por nuestra economía y nuestro futuro”. Según la OMS el cambio climático afectará grandemente nuestra salud, especialmente en aquellos países donde el sistema sanitario y de salud son endebles, o sea en muchos países como el nuestro. Por lo pronto hay un fuerte movimiento internacional para contrarrestar las elucubraciones de políticos como el presidente norteamericano que parece no comprender el alcance de su acción tal como no sabe comprender que su actividad en twiter es seguida por millones de personas y no le perdonan errores como el enviado con la palabra que no existía, antes de que la mencionara, “covfefe” que solo él puede decir qué quiso decir con ella, así mismo está su cabeza en cuanto al cambio climático, confundido pero mortal pues es una decisión tomada por la primera potencia mundial. Aunque ya la población mundial está sintiendo el problema del calentamiento, son las futuras generaciones las que deberán confrontar aún más este problema y no es justo dejarle este asunto para que los resuelvan por lo que hay que hacer lo necesario para contrarrestarlo. Ojalá mañana no se confunda nuevamente y nos sumerja en una guerra nuclear. Amanecerá y veremos.