
¿Por qué Estados Unidos es el
segundo país más contaminante del planeta tierra?
El
primero es China. Esto es debido a que las emisiones de gases de efecto
invernadero al ambiente de ambos países contribuyen grandemente a los efectos
del cambio climático que estamos padeciendo los mortales. Por ello las naciones
del mundo tomaron la decisión de llegar a un acuerdo de bajar el calentamiento
global a un mínimo. Se calcula que si no se actúa de inmediato para el próximo
siglo la temperatura alcanzará 4.5° centígrados lo que hizo necesario crear
políticas encaminadas a lograr un resultado de 3.5°C, pero con el acuerdo de
París se tiene contemplado bajarlo aún más, al 2.7°C.
El cambio climático es un hecho, no hay duda sobre
esto. Los científicos han logrado establecer que el mismo es debido a la
actividad humana en el planeta logrando acelerar cambios que hubieran tomado
muchos siglos en aparecer. Los Estados Unidos a lo largo de 160 años ha sido el
mayor emisor de dióxido de carbono resultado de la quema de combustibles
fósiles como el petróleo y sus derivados, de gas, y de carbón siendo
considerado como el responsable del 27% de las emisiones de CO2 del mundo. Les
sigue la Unión Europea entre ellos, Reino Unido, Alemania y Francia con un 25%.
China está en tercer lugar (11%), aunque hoy ocupa el primer lugar. Luego
aparece Rusia con (8%), Japón (4%) India (3%) y Canadá (2%), todo esto forma parte
de un registro llevado a cabo durante el periodo 1850-2011 del Centro de
Análisis sobre Dióxido de Carbono.
La actividad humana emite gases como
el metano producido principalmente por la extracción y procesamiento de
petróleo y gas, la crianza de ganado, los cultivos de alimentos y los
vertederos de basura. Los norteamericanos estuvieron entre las cinco naciones
que más metano por toneladas métricas produjo en el 2012. El resultado fue así,
China, 1.752. India, 636. Rusia, 545. Estados Unidos, 499. Brasil, 477. La NASA
observó un “punto caliente” entre Arizona, Colorado, Nuevo México y Utah, unos
6,500 k2, solo en ese lugar se vertieron 59 millones de toneladas
métricas de metano a la atmosfera por la fuga en la producción de gas natural. Otro
de los argumentos de por qué debe los Estados Unidos hacer lo imposible para
mitigar el calentamiento global es que tiene el mayor consumo de electricidad
por persona a nivel mundial y ha estado encabezando las estadísticas desde hace
50 años junto a Canadá.
Aunque algunos vaticinan que este
abandono no significa en absoluto problemas para el mundo debido a que son las
empresas las que están liderando el cambio de timón frente al uso más cónsono
de productos amigables con el ambiente, incluso a lo interno de los Estados
Unidos, sus efectos producirán un duro revés a estos esfuerzos empresariales.
Se prevé que la decisión de Trump podría sumar 0,3°C a la temperatura media
global para el año 2100. Esta medida tomada por Trump supone la creación de
empleos en la industria de generación de electricidad que usa combustible
fósiles, como el petróleo o el carbón. En ella participan casi 1.100.000 personas.
Sin embargo, a la par han estado creciendo el uso alternativo de energías
renovables gracia a la política implementada por el expresidente Obama en el
quinquenio pasado como la solar cuyo ritmo de crecimiento está por el orden del
25% anual y el eólico al 32% empleando en la actualidad a casi unas 900.000
personas.
Por lo pronto la medida ha sido
criticada por los principales países del orbe, y ha tenido consecuencias en el
campo de los llamados asesores del presidente pues importantes figuras han
presentado sus renuncias a lo largo de esta semana, por ejemplo, Elon Musk,
presidente de Tesla y SpaceX, Bob Iger, CEO de Disney, y empresas como
Facebook, Ford, Apple, Microsoft han hecho circular sendos comunicados en
contra de la medida tomada, incluso la petrolera Exxon. Es importante resaltar
que Estados como California, Oregón, Connecticut, o ciudades como Houston, o
Nueva Orleans han manifestado claramente que harán caso omiso a las intenciones
del gobierno de Trump y continuarán aumentando sus objetivos de lograr la
reducción de emisiones y transformación al uso de energías más limpias y
amigables con el ambiente. “Fui elegido para representar a los ciudadanos de
Pittsburgh, no de París… El resto del mundo aplaudió cuando firmamos el
acuerdo. Se volvieron locos… por la simple razón de que ponía a nuestro país,
al que tanto quiero, en desventaja… El acuerdo atenaza a Estados Unidos para
obtener el aprecio de capitales y activistas que sólo buscan sacar beneficio de
nuestro país…”, dijo el presidente Trump. Pero estas palabras no cayeron muy
bien a las autoridades de la ciudad de Pittsburgh pues una de ellas el alcalde Bill
Peduto, demócrata, aseguró que seguirá implementando el Acuerdo de París, por
“nuestra gente, por nuestra economía y nuestro futuro”. Según la OMS el cambio
climático afectará grandemente nuestra salud, especialmente en aquellos países
donde el sistema sanitario y de salud son endebles, o sea en muchos países como
el nuestro. Por lo pronto hay un fuerte movimiento internacional para
contrarrestar las elucubraciones de políticos como el presidente norteamericano
que parece no comprender el alcance de su acción tal como no sabe comprender
que su actividad en twiter es seguida por millones de personas y no le perdonan
errores como el enviado con la palabra que no existía, antes de que la
mencionara, “covfefe” que solo él puede decir qué quiso decir con ella, así
mismo está su cabeza en cuanto al cambio climático, confundido pero mortal pues
es una decisión tomada por la primera potencia mundial. Aunque ya la población
mundial está sintiendo el problema del calentamiento, son las futuras
generaciones las que deberán confrontar aún más este problema y no es justo
dejarle este asunto para que los resuelvan por lo que hay que hacer lo
necesario para contrarrestarlo. Ojalá mañana no se confunda nuevamente y nos
sumerja en una guerra nuclear. Amanecerá y veremos.